La intolerancia a la lactosa es un afección bastante común que puede ser sufrir cualquier persona, sin importar la edad, siendo mas común a medida que avanzamos la edad.
La lactosa es un azúcar doble (disacárido) que se encuentra en la leche y los productos derivados de la misma y la lactasa es una enzima que ayuda a procesar la lactosa y separar sus dos componentes glucosa y galactosa.
Los síntomas que generan ser intolerante a la lactosa son desagradables y molestos, pueden generar vómitos, diarreas ,distensión abdominal y malestar general. Estos síntomas se puedes presentar media hora después de ingerir una cantidad de lácteo que no puedas procesar y hasta dos horas después.
La intolerancia a la lactosa tiene niveles de gravedad desde nivel bajo, que se puede catalogar como indigestión, un nivel medio en la que ocasionalmente puedes tolerar ciertos lácteos y por ultimo cuando es severo, donde el mínimo alimento que consumas te genera reacción.
También es cierto que es importante acudir a un medico para que te realicen pruebas y te ayuden a descubrir que nivel de intolerancia presentas ya que dependiendo de los análisis se podrá ver que tratamiento es el mas adecuado para ti .
Existen en el mercado suplemento de lactasa que te ayuda procesar los lácteos que ingieras, pero también es cierto y recomendable que a pesar de ser intolerante a la lactosa no dejemos de consumir lácteos, ya que en algún momento la intolerancia podría remitir y gradualmente nuestro organismo podría poco a poco comenzar a producir de nuevo la lactasa de manera natural, de allí el que se diga que a media que dejamos de consumir leche todos nos volvemos intolerantes a la lactosa.
Hoy en día hay muchas alternativas a la leche y son mas frecuentes las elaboraciones sin lactosa en los restaurantes lo que nos permite disfrutar con los demás de las comidas.